Datos sin trascendencia, a decir de Garibay, ya que determinó que su paso por la vida debía resumirse en palabras concisas, sobrias, lapidarias, parcas de ser preciso
Exiliado de Checoslovaquia desde 1975, vivió en París y escribió su amplia obra en francés. Títulos imprescindibles, así cambien las portadas
El escritor ensenadense presenta su nuevo libro: “Nietzsche. El príncipe sublime del intelecto”
Lo sé, hay palabras que no sirven para explicar un sentido secreto, pero existen otras que, en su cúmulo intacto —parafraseando a Hesse—, nos obsequian la bendición del entendimiento universal...
Las trampas de la escritura del hermano de Nuno Lobo Antunes es un reflejo trabajado a partir de una entusiasta lectura de Juan Rulfo
Jean-Paul Sartre proclamaba que el terror, como arma histórica —error dentro del horror, considero—, se encontraba al alcance de los parias y solía proferir: “¡El terrorismo es la bomba atómica de los pobres!”
Aquí hay algo que, como occidentales, no debemos dejar de observar: las glosas con las que vemos, “analizamos” y juzgamos aquello que desconocemos, como en este caso es la cultura tibetana
Balbuceo el fuego de un discurso, el libro de Julio Scherer García, “Secuestrados”. Con la maestría del realismo medular, proceso designado al periodismo, el ex director general del periódico Excélsior devela, detalle a detalle, el infierno de uno de los rostros más canallas de la condición humana
Podríamos confundirlo con Gurdjieff en juerga, pero su metafísica es marxista. Se trata de Martín Caparrós, que ha sido galardonado esta semana con el Premio de Periodismo Ortega y Gasset a la Trayectoria (2023)
La serenidad es un perro con sarna, al que ya nadie molesta. Es pelitieso, de repugnantes ojos acuosos y eso lo aleja de las dolencias de cualquier cariño. Su deterioro es su defensa, su sólida protección en esta torpe vida