Cobran 500 pesos a migrantes por acampar en casa particular
Tijuana, 17 de noviembre. Un grupo de alrededor de 30 familias pernocta hacinado en un mini campamento improvisado, donde les cobran 500 pesos a la semana por dos metros cuadrados o una casa de acampar.
El pequeño campamento -similar al registrado en 2020 en El Chaparral- se encuentra en el segundo piso de un domicilio particular ubicado entre la calle Ingeniero Fernando Sánchez Ayala y avenida Internacional, en la Zona Centro.
María, es una de las personas en contexto de movilidad que viven ahí. Su esposo y dos hijos tuvieron la necesidad de pernoctar en este campamento clandestino, el único lugar donde pueden protegerse de las inclemencias del frío; anteriormente acampaban con carpas en la calle, pero fueron retirados por el Ayuntamiento por dar «mala imagen».
“La señora nos abrió la puerta y nos dio cobija, estamos esperando que un día nos abran las puertas del albergue, no hay espacio. Cobran a la semana 500 pesos, es un espacio dentro de la casa, dormir en el piso, en una casita (de acampar)”, dijo la migrante michoacana.
La mayoría de las 30 familia migrantes está formada por mexicanos desplazados por la violencia; llegaron a Tijuana con la intención de cruzar a Estados Unidos.
“Nos quitaron de la calle que por la imagen, pero antes no pagábamos en la calle y ahora lo que hace mi esposo es salir a trabajar en el día para juntar los 500 pesos de la semana y la comida, a veces llegan personas a regalarnos ropa y comida, vienen al albergue, pero a veces nos toca a nosotros”, comentó otra migrante que omitió su nombre.
Afuera del campamento clandestino, los migrantes lavan y tienden su ropa; acondicionaron una cocina para preparar alimentos, ignorados por las autoridades y sin un albergue que los pueda recibir.
Hacen negocio con migrantes por falta de apoyos a albergues, asegura activista
Las cuarterías de la Zona Centro están haciendo negocio con la saturación de albergues en la ciudad y por permitir colocar una carpa tienen ganancias económicas, una problemática que se dio por la falta de apoyos a albergues, señaló José Luis Pérez Canchola, consejero de la Academia Mexicana de Derechos Humanos.
“Esto se debe a que no hay albergues públicos, el gobierno federal está obligado y tiene el recurso federal de abrir albergues para migrantes nacionales y extranjeros, hay parques, hay centros deportivos que pueden convertir en albergues”, señaló el también experto en temas migratorios.
Pérez Canchola señaló los peligros para los migrantes de pernoctar en albergues clandestinos de migrantes, pues viven hacinados y en condiciones insalubres.
“El problema sigue y se agrava, yo prefiero que sean en lugares públicos y no encerrados porque pueden ser víctimas de situaciones como casos de abuso sexual, abuso sexual de menores”.
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