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Ex marine regresa a EU después de casi 20 años de haber sido deportado

Por: Redacción La Jornada Baja California

Tijuana, 19 de diciembre. Casi 20 años tuvieron que pasar para que Raúl Orlando Calix Pineda, un ex integrante del Cuerpo de Marines de Estados Unidos, pudiera regresar a la Unión Americana después de haber sido deportado y separado de su esposa y cuatro hijas.

Este martes, Calix Pineda pudo cruzar al país vecino gracias a que le fue otorgado un permiso humanitario para cuidar a una de sus hermanas, quien padece cáncer y tiene problemas para respirar y alimentarse.

En la garita lo estaban esperando su esposa y una de sus hijas, quienes expresaron su emoción de tenerlo de vuelta justo para las fiestas decembrinas.

Calix Pineda llegó a Estados Unidos en 1969, proveniente de Honduras y llevado por su madre junto con sus cuatro hermanos. En los años 80 sirvió como marine, pero fue deportado en 2005, después de haber pasado tiempo en prisión por un fraude de aseguranza.

Nunca creí que fuera posible que alguien que ha servido a su país lo iban a deportar por cualquier cosa que uno haga, así que fue una sorpresa para mí”, expresó.

Al haber sido expulsado de Estados Unidos, primero estuvo cinco años en Honduras, después decidió trasladarse a Playas de Rosarito para estar mas cerca de su familia y que ellas lo pudieran visitar.

Aunque su experiencia en México fue buena, siempre tuvo la intención de regresar al país que consideraba su hogar. En el tiempo que estuvo lejos, dos de sus hermanos fallecieron, lo que fue motivo de gran tristeza por no poder estar en sus funerales.

Respecto a sus planes, contó que su permiso tiene una duración de un año, pero espera aprovechar ese tiempo para buscar la manera de legalizarse y permanecer en la Unión Americana.

María de los Ángeles López, la esposa del ex marine, aseguró que tener a su marido de vuelta es el mejor regalo navideño que pueden tener como familia porque fueron muchos años de espera.

Relató que fue muy difícil la separación porque hubo ocasiones en que tuvo que dejar a sus hijas para ir a Honduras a visitar a su esposo, pero resaltó que siempre tuvo el apoyo de ellas.

Entre lágrimas de emoción, su hija, Irene Morales, expresó su alegría de tener a su padre en casa; agregó que su familia ya lo está esperando del otro lado para pasar las festividades navideñas y año nuevo juntos.

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