Coalición de derecha en EU cuestiona si México es aún aliado
Washington y NY, 21 de julio.- Organizaciones conservadoras estadunidenses, que incluyen a ex personal del gobierno de Donald Trump, junto con una agrupación mexicana, lanzaron un ataque directo contra la retórica oficial positiva del gobierno de Joe Biden sobre México, proponen un mayor enfoque crítico sobre lo que, sostienen, es el mal manejo de la corrupción, seguridad, libre comercio y defensa de instituciones civiles del gobierno de Andrés Manuel López Obrador y cuestionaron si el país vecino es un aliado de Washington.
“Lamentablemente, el gobierno mexicano ya no es un aliado de Estados Unidos y ya no puede ser considerado un socio”, declaró la Coalición de Políticas Conservadoras de Estados Unidos-México. “La caída del Estado mexicano en una espiral de violencia, corrupción y autoritarismo de izquierda es una amenaza directa tanto para Estados Unidos como para los ciudadanos mexicanos”.
La nueva coalición, anclada en el Texas Public Policy Institute, incluye al influyente think tank conservador Heritage Foundation, el Center for Renewing America y el America First Policy Institute –todos los cuales incluyen ex funcionarios que trabajaron en el gobierno de Trump y otros republicanos. La única organización mexicana que forma parte de esta nueva coalición se llama Patria Unida por un México Valiente y está encabezada por la panista Alicia Galván López y Francisco Humberto López Vega [https://www.jornada.com.mx/2022/06/18/politica/003n1pol].
La inclusión de la organización mexicana, explica Joshua Treviño, del Texas Public Policy Institute en un podcast, es un reconocimiento de que “todos los problemas identificados aquí tienen como su principal y primera víctima a los propios mexicanos”. Treviño informa que las organizaciones se reunieron para describir la “realidad” de la situación actual en México, aunque podrían tener diferencias sobre cuáles son los mejores pasos para la política estadunidense en torno a la relación bilateral.
Señalan que muchos en Estados Unidos rehúsan reconocer la “realidad” en México, incluyendo que “el gobierno mexicano y los cárteles criminales mexicanos mantienen una relación de simbiosis consciente”, que el gobierno mexicano “no está cumpliendo con su deber de ejercer plena soberanía sobre su territorio y ciudadanía” y que “está fallando en su obligación de proteger su territorio y evitar que sea utilizado como una base de operaciones contra sus vecinos”, o sea, Estados Unidos.
La nueva Coalición de Políticas Conservadoras de Estados Unidos-México acusa que “el presidente actual de México ha expresado su disposición a establecer pactos con los cárteles y ha manifestado su disposición a defenderlos de acciones por parte de Estados Unidos”.
El tono de la declaración es más mesurado que la retórica incendiaria empleada por algunos legisladores y gobernadores republicanos en meses recientes, que ha incluido la amenaza de acción militar estadunidense en territorio mexicano contra los cárteles, pero nutrirá la narrativa contra el gobierno mexicano en sectores conservadores estadunidenses.
No queda claro si Trump incorporará parte de este discurso a su mensaje electoral, ya que hasta la fecha ha sido una narrativa esquizofrénica. Por un lado, en las últimas semanas Trump se sumó a la competencia entre figuras republicanas sobre quién tenía la postura más extrema para enfrentar la droga y migración proveniente de México, y el ex presidente afirmó que contemplará un bloqueo naval de puertos en el país vecino y el despliegue de tropas militares en la frontera. También ha repetido: “me cae muy bien el Presidente de México. Es un socialista pero, saben, uno no puede tenerlo todo… Es un amigo mío, un gran tipo”.
La campaña electoral de Trump no respondió a preguntas de La Jornada antes del cierre de la edición sobre cómo el candidato percibe esta nueva coalición.
Al aproximarse las elecciones nacionales de 2024 tanto en México como en Estados Unidos, no hay duda de que habrá cada vez más propuestas y críticas sobre el manejo de las relaciones bilaterales y sobre cómo “interpretar” a México. Esta semana, por ejemplo, el Center for Strategic and International Studies, otro think tank conservador, emitió un informe titulado “Después de AMLO: las perspectivas económicas, de seguridad y políticas de México”, el cual concluye que el país está “económicamente estancado a pesar de una oportunidad de una vez cada generación presentada por el nearshoring”.
Al ofrecer su critica detallada de 30 páginas sobre la 4T, el informe advierte que López Obrador no se desvanecerá del escenario político: “su base de simpatizantes es suficientemente grande y leal para permitirle comandar influencia sustancial” en el futuro.