Abre el peso con depreciación; cotiza en 20.36 por dólar
Luego de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, negó ayer que vaya a moderar su política arancelaria, el peso mexicano se presiona ligeramente esta mañana frente al dólar.
En la apertura de los mercados de América del Norte, la divisa mexicana opera con una depreciación de 0.31 por ciento frente a la divisa estadounidense, para operar en alrededor de 20.3696 pesos por dólar.
Cabe recordar que al cierre de la sesión de ayer, el tipo de cambio cerró en el mercado interbancario (al mayoreo) en 20.3096, lo que representó una ganancia de 1.75 por ciento frente al cierre del viernes pasado. El mercado se animó ante notas informativas que hablaban de que Trump moderaría sus políticas de aranceles, lo cual desmintió el próximo mandatario.
Mientras tanto, el índice del dólar, que mide su comportamiento frente a una canasta de seis monedas internacionales, presenta una marginal caída de 0.03 por ciento, a 108.070 puntos.
A la espera esta semana de datos relevantes del empleo estadounidense, principalmente el dato de diciembre, los mercados financieros mantienen la cautela, pues si el mercado laboral se mantiene fuerte, no habrá mucha necesidad por parte de la Reserva Federal (Fed) para apresurar sus recortes en las tasas de interés, manteniendo el precio del dinero elevado por más tiempo, y hacer una pausa por algunos meses.
Durante la jornada de este martes, el mercado espera la encuesta de ofertas de trabajo y rotación laboral de noviembre en Estados Unidos.
En el mercado de deuda se observa un ligero recorte de la rentabilidad, pues el interés del bono estadounidense a 10 años se mantiene por encima del 4.60 por ciento, a 4.640 por ciento, después del 4.67 por ciento.
Así, Wall Street abre al alza, con el Dow Jones que presenta una ganancia de 0.41 por ciento; mientras que el Nasdaq sube 0.03 por ciento.
Los futuros del crudo WTI operan en torno a los 74 dólares por barril, recuperándose de pérdidas anteriores y acercándose a máximos de tres meses, ante las preocupaciones sobre la escasez de suministro de petróleo ruso e iraní, debido a la escalada de sanciones occidentales. Las preocupaciones por la escasez de oferta impulsaron una mayor demanda de petróleo de Medio Oriente, evidente en la decisión de Arabia Saudita de aumentar los precios del petróleo para Asia en febrero, que es el primer incremento de precios de este tipo en tres meses.