Cine Bujazán, un edificio histórico de Tijuana
Tijuana, 12 de julio. Fue el 7 de julio de 1951 cuando el empresario Miguel Bujazán, de origen libanés, inauguró en Tijuana el Cine Bujazán, que podía albergar hasta 2 mil 400 espectadores y en su época fue considerado como el más grande y lujoso de la zona norte del país.
Lamentablemente, en 1993 un cortocircuito provocó un incendio que terminó con gran parte de la infraestructura del espacio. A raíz de este incidente, el lugar quedó sin techo.
Por su antigüedad y por los efectos del fuego, actualmente el patio central donde se proyectaban las películas se encuentra en ruinas, adornado por murales urbanos pintados por artistas locales.
A pesar de estas condiciones, en la actualidad este sitio es la sede de una escuela de cinematografía, una cafetería y un foro de conciertos.
Enrique González Silva, director del Observatorio Centro de Estudios Cinematográficos, explicó que las clases de esta institución se imparten por la mañana, mientras que en las tardes el inmueble alberga funciones de cine gratuitas.
Alianzas con promotores han permitido que Julieta Venegas, Miranda!, Porter y León Larregui se presenten en el foro.
A lo largo de su historia este recinto ha sido sede de diversos eventos culturales, como conciertos, presentaciones de libros, exposiciones fotográficas e, incluso, informes de gobierno.
Derivado del impacto positivo que tuvo en la región y en el país, el Cine Bujazán actualmente es considerado patrimonio cultural de Baja California, siendo reconocido por la comunidad como un lugar de tradición.
