Amigo mío: Desde niña aprendí que es posible hablar con la soledad si le pones el rostro y el nombre de una persona querida. Por eso hoy, Tomás, te convertí en el destinatario de este mensaje. En cuanto lo termine lo enviaré a tu correo. Celebro no haberlo borrado a pesar de que, a poco […]
Hay cosas igual de malas o peores que la soledad: sentirse rechazada por cosas que fueron sucediéndole a uno
"Lo que más abunda en el mundo son las ausencias". A las muchas que ya he padecido, un día me llegó la hora de sumar la tuya
Llorando y a toda prisa, Carolina baja las escaleras. Su actitud y su precipitación provocan curiosidad y extrañeza entre quienes la miran desde las oficinas. La sigue Nayeli, secretaria del contador Narváez en Recursos Humanos. Nayeli: –No corras, te puedes caer. Carolina: –¡Qué me importa! (Gira hacia su compañera.) Si vienes a decirme otra vez […]