No cabe duda que cuando un rockstar irrumpe su recuerdo es difìcil de olvidar, inclusive para Magú que no tiene muchos santos devotos.
Para Magú Palacio Nacional es un espacio donde es fácil resbalar y caer en los extremos, tan es así que asume que ómicron salió en estampida.
El consejo de Magú ante la fatalidad de ómicron es la compostura y las buenas maneras ante todo, avísenle a Sheimbaum si ya calacas, dice.
¡Claro! La ilusión de los Reyes Magos es desde cualquier contexto un estado supremo de felicidad como para dejarlo en el olvido. Gracias Magú.
Sabemos que el personaje que caricaturiza Magú es el canciller Ebrard por el contexto de la demanda contra la venta de armas letales.
En un imaginario los pavos discuten postular a un candidato para que desde el poder político los beneficien con una amnistía.
Bien merecida pena tienen los pavos y se hace constar que no obedece a sus prodigas carnes, sino a su oposición al Gas Bienestar.
Ahora los pavos arremeten contra los precios del gas, demandan su aumento para proteger a sus compañeros de especie ante la cena navideña.
Interesantes analogías encuentra Magú entre el reclamo de los pavos que ahora se manifiestan frente a la Comisión Nacional de Búsqueda.