Después de 2 años de crisis hídrica, ‘Alberto’ llenó de agua a NL
Después de padecer una crisis hídrica por más de dos años a consecuencia de una sequía prolongada, las torrenciales lluvias que generó la tormenta tropical Alberto en Nuevo León casi llenaron la presa La Boca (con capacidad de 40 millones de metros cúbicos de agua), cuyo almacenamiento pasó de 35.4 a 93.2 por ciento, por lo que comenzó a ser desfogada; mientras, el embalse de Cerro Prieto (que puede albergar 300 millones de metros cúbicos) aumentó de 4.9 a 12 por ciento.
En tanto, la madrugada de ayer, cuando se desarrollaba el temporal, un hombre se electrocutó en el municipio de El Carmen al tratar de arreglar su medidor de luz, con lo que suman en la entidad cuatro decesos relacionados con el meteoro.
La tormenta tropical Alberto, la primera de la temporada, tocó tierra este jueves a las 4:30 horas, tiempo del centro de México, en las inmediaciones del municipio de Ciudad Madero, Tamaulipas, con vientos máximos sostenidos de 85 kilómetros por hora.
Alrededor de las nueve de la mañana se degradó a depresión tropical aproximadamente a 50 kilómetros al oeste-noroeste de Ciudad Valles, San Luis Potosí, y a 155 al oeste de Tampico, Tamaulipas, y para las tres de la tarde ya era baja presión remanente cuando se encontraba a 55 kilómetros al nor-noreste de la capital de Aguascalientes.
En su conferencia matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador indicó que fue desplegado personal del Ejército, la Marina y la Guardia Nacional para proteger a la población de los efectos de Alberto. Precisó que se hace especial énfasis en aquellas personas que residen a orillas de los ríos, arroyos o en zonas bajas, ante el potencial crecimiento de los cauces.
La Guardia Nacional precisó que mantiene activo el Plan de Asistencia a la Sociedad en Casos de Emergencia (Plan GN-A) en Tamaulipas, Veracruz, Nuevo León y San Luis Potosí, así como en zonas de Yucatán, Tabasco, Campeche y Quintana Roo.
Las lluvias que anhelaban habitantes de la Huasteca potosina, azotada por el peor estiaje de la época reciente –que provocó pérdida de ganado, así como de cultivos de caña de azúcar, cítricos, café y maíz–, por fin llegaron a esa región con la tormenta tropical Alberto, por lo que comenzaron a recuperarse cascadas, ríos y arroyos.
César Contreras, productor cañero del ingenio Plan de San Luis, ubicado en el ejido La Hincada del municipio de Ciudad Valles, comentó que las precipitaciones traen esperanza a las familias. «Con esta agua que nos cae podrán salvarse algunas de nuestras plantas de caña, no todas porque algunas ya están secas, pero con esto podemos empezar de nuevo a trabajar el campo; queremos que nos caiga otro huracán para que los pozos y el río se recuperen», declaró.
Julio Ortiz, miembro de una cooperativa de pescadores de la laguna Marland, en el municipio de Ébano, manifestó que con los recientes aguaceros se restablecerán cuerpos de agua, incluidas cascadas que perdieron su líquido.
En Coahuila hubo deslaves y escurrimientos en distintos tramos de la vía Saltillo-Monterrey, que mantuvieron detenido por varias horas el tránsito de vehículos, en su mayoría de transporte de carga.
Otro incidente ocurrió en Ramos Arizpe, donde bomberos y elementos de Protección Civil pusieron a salvo a más de 20 personas que estaban en un camión de transporte de personal atrapado por una corriente de agua en el Parque Industrial Santa María.