Sheinbaum firma reformas secundarias en materia energética
Ciudad de México. La presidenta Claudia Sheinbaum firmó el paquete de reformas secundarias en materia energética con lo cual se revierten las reformas neoliberales en este sector; se recuperan el carácter de empresas públicas de Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal Electricidad; se otorga a la Secretaría de Energía la capacidad de planeación y supervisión en el desarrollo de este sector garantizando la transición energética; se recupera la industria petroquímica.
Con estas reformas, se cancelan todas las modificaciones legales y constitucionales aprobadas durante el neoliberalismo para favorecer la privatización de Pemex y la CFE. Con estas reformas que se enviarán al Congreso, “las empresas públicas dejan de ser empresas productivas del estado y son empresas públicas del estado. Parece que no serán productivas, pero en realidad serán más productivas, eficientes, transparentes y tendrán a la austeridad republicana como eje de su operación.
Señaló que con estas leyes que sustituyen por completa a la reforma de 2013, es una reforma muy profunda en el sector energético que establece la prioridad de la empresas públicas para garantizar el suministro de hidrocarburos y de energía eléctrica. Con ello se cancela el régimen que las equiparaba como empresas privadas para ponerlas a competir en condiciones desfavorables y se suprime la posibilidad de que a CFE y Pemex se les pueda considerar como monopolios.
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“Esto permitirá además de la recuperación de soberanía energética y el mejor funcionamiento de CFE y Pemex, cumplir con el Plan México porque va a haber disponibilidad de energía, mecanismos claros de financiamiento público y la participación privada queda norma y establecía en electricidad en 46 por ciento, pero bajo la rectoría del estado”, dijo Sheinbaum.
Reversión de reformas neoliberales
Al explicar el paquete de reformas, la secretaria de Energía, Luz María González, dijo que son cinco leyes principales y la armonización de seis más. “Este paquete representa la reversión de las reformas neoliberales aprobadas desde 1992 (con Carlos Salinas) hasta 2013. Fueron cambios que en su momento pretendían la privatización de Pemex y la CFE.
Estas modificaciones que se propondrán al Congreso garantizan las condiciones para el desarrollo del sector para recuperar la soberanía energética con un sentido social, pues se priorizará el suministro de energía a las regiones más marginadas.
Se expedirán las leyes de empresa pública de Pemex, la ley de empresa pública de la CFE, la ley de Planeación y Transición Energética; la ley de la Comisión Nacional de Energía (organismo desconcentrado de Sener que sustituirá la Comisión Reguladora de Energía).
Las reformas legales permitirán al Estado retomar la planeación estratégica de este sector a través de la Secretaría de Energía con definiciones vinculantes de mediano y largo plazo para regular el desarrollo del sector; se reconoce la importancia estratégica del sector hidrocarburos y no sólo del mercado eléctrico.
González dijo que con las reformas se establece la estrategia sectorial de energía, se retoma plan de transición energética, plan de desarrollo eléctrico e hidrocarburos se reconoce por primera vez el concepto de justicia energética para reducir las desigualdades en acceso y uso de energía para atención prioritaria a la personas mas vulnerables.
Con la ley de la CFE y la ley de Pemex se reconoce que la esencia de CFE y Pemex es cumplir responsabilidad social. En el caso de CFE, garantiza la confiabilidad, accesibilidad del mercado eléctrico y el de hidrocarburos. Se definen conceptos de prevalencia, propiedad y generación de energía para que la empresa pública tenga prevalencia en el sector eléctrico por lo que desde la planeación se garantiza la participación de la CFE el 54 por ciento del mercado.
