Prevalecen «rutas tradicionales» de ‘polleros’ para cruzar a migrantes
Ciudad de México, 1 de julio.- Para ingresar a Estados Unidos, las estrategias de los polleros o coyotes son muy similares a las que existen desde hace más de 20 años, aunque han perfeccionado algunas. Las personas que más pagan cruzan los puntos fronterizos con documentos falsos y otras lo hacen ocultas en camiones que transportan diversas mercancías o en autos particulares, explicaron representantes de casas de migrantes y académicos.
A la vez, prevalecen las rutas “tradicionales” por medio del río, el desierto o hasta saltando parte del muro guiados por los traficantes. Los polleros deben pagar a grupos del narcotráfico que controlan las ciudades fronterizas o son ellos también parte de las mismas bandas.
Una vez que los migrantes logran llegar a la frontera con Estados Unidos, no significa que lo más difícil haya terminado, ya que no pueden cruzar si no es “dando dinero al crimen organizado, y en este caso, a los que se dedican a la trata de personas”, aseveró Luis Oswaldo Valenzuela, coordinador del Programa de Asuntos Migratorios de la Universidad Iberoamericana en Torreón, Coahuila.
Se manejan diferentes cuotas, y dependiendo de lo que pagues es lo que recibes. “Pueden cruzar con identificaciones falsas, en vehículos individuales” y, si es más barato, “cruzarían en estos tráileres con contenedores grandes que transportan mercancía. Esto se da con la colusión de autoridades mexicanas, de los tres órdenes de gobierno, dependiendo de la zona, y también de las estadunidenses”.
“Prefiero morir así”
Igualmente, detalló, hay personas que saltan el muro fronterizo, pero ”con cierta colusión del crimen organizado”. Aunque saben que es riesgoso, algunos de ellos han mencionado “que prefieren morir de esa forma que en sus países de origen”.
El hecho de que la frontera norte “esté más blindada” obliga a los migrantes a “entregarse a manos del crimen organizado, prácticamente no hay de otra”.
Alberto Xicoténcatl, director de la Casa del Migrante de Saltillo, Coahuila, coincidió en que migrantes refieren que cruzan incluso por los puentes fronterizos, pero presentando documentación falsa.
Los migrantes “llegan en tráileres a la frontera, ahí se bajan (esto ocurre también con camionetas, en coches, en diferentes transportes), y es ahí donde quienes los cruzan muchas veces son gente de las bandas de la delincuencia mexicana que controlan la frontera, eso es un hecho”.
Una vez que cruzaron, los espera otro transporte que los lleva a distintas ciudades, donde los concentran en “casas con gran número de personas dentro, y es donde las dividen dependiendo adónde van. Son casas que en México les llamaríamos de seguridad, porque así les llama la delincuencia organizada, pero esas mismas casas existen en Estados Unidos”.
Los polleros no son personas aisladas, “están relacionados con cárteles que están establecidos en las principales regiones, y dependiendo de dónde se encuentre el cruce, se relaciona con el cártel que predomine en la zona”, añadió Valenzuela.
Al profundizar sobre el papel de las casas de seguridad en territorio estadunidense, Gabriela Hernández, directora del albergue Tochan en la Ciudad de México, relató que los migrantes cuentan que luego de cruzar los retienen por un tiempo en “ranchos”.
Lo que sabemos, dijo, es que los tienen trabajando, “con salario mucho menor, y se ven obligados a estar ahí porque es una zona donde tendrían que caminar otro tanto para llegar hacia donde hay más fuentes de trabajo”. Desempeñan labores del campo, para sembrar y cuidar ganado, entre otras.