Entrega gobernación sexto Informe en el Congreso, ignorando a oposición
Ciudad de México,1 de septiembre.- A gritos desde la tribuna, donde se dirigió a las “compañeras y compañeros” haciendo tabla rasa de la oposición, la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde Luján, rompió el protocolo en la entrega del último Informe presidencial, en un tono que terminó en lo que se veía venir: los gritos de “¡fuera, fuera, fuera!” que le soltaron los panistas.
En contraste con la austeridad de su discurso del año pasado, este domingo Alcalde dedicó diez minutos a una intervención donde incluso se refirió al resultado de la elección del 2 de junio.
Sesión
De inicio, Alcalde Luján no saludó a los senadores y diputados presentes en el recinto, para el inicio del primer periodo de sesiones ordinarias de la 66 Legislatura, donde se abordará como prioridad la reforma al Poder Judicial de la Federación.
Únicamente se dirigió a la presidenta de la Mesa Directiva de la cámara, Ifigenia Martínez, y al “presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, ¡qué bien suena eso!”
Mientras batía el puño en alto, la funcionaria hizo referencia a la lucha “de muchos años” de millones de mexicanos que no se dieron por vencidos” y luego mencionó que el Informe refleja la “esencia del humanismo mexicano”.
Hasta ese punto, la oposición se había mantenido en silencio, que rompió con abucheos a la funcionaria, que elevó aún más la voz.
Luego, citó que en la elección presidencial “millones de mexicanos decidieron que siguiera el segundo piso de la cuarta transformación y decidieran que fuera una mujer la primera presidenta de nuestra patria, ¡la doctora Claudia Sheinbaum Pardo!”
Desde las curules donde Morena y sus aliados dominan el salón surgieron gritos de “¡presidenta, presidenta!”
Legado
La funcionaria dijo entonces que “quizá uno de los legados más importantes que nos habrá de dejar el presidente de México para el futuro, es que, si en algún momento más adelante regresan por sus privilegios los que se creían dueños de México, las nuevas generaciones tendrán la receta, el camino ya probado, que es que sólo el pueblo puede salvar al pueblo y que sólo el pueblo organizado puede salvar a la nación. La ruta es la democracia”.
Oposición
Desde el PAN arreció el abucheo y los gritos de “¡fuera, fuera, fuera!”, que Morena y sus aliados devolvió con “¡es un honor estar con Obrador!” Los panistas no se detuvieron e insistieron con una palabra que han comenzado a manejar como parte del discurso político: “¡resistencia, resistencia!”
En las curules aledañas, sus recientes aliados electorales, los priístas hicieron mutis.
Mientras la funcionaria se dirigió otra vez solo a sus compañeros de partido, éstos se mofaron del panismo con exclamaciones de “¡quieren llorar, quieren llorar!”, al que respondieron los blanquiazules con un “¡quieren robar, quieren robar!
Dijo la funcionaria: “Compañeras y compañeros, les informo que el presidente ha decidido no hacer uso de su facultad para poder presentar una iniciativa preferente. Como ustedes saben este recinto cuenta ya con las iniciativas de reforma constitucional que fueron presentadas por él el pasado 5 de febrero.
“Les toca todos ustedes, verdaderos defensores del pueblo, tomar la última palabra y decidir qué sucederá. Ustedes seguirán haciendo historia”.
Solo entonces, la titular de Gobernación entregó a la diputada Ifigenia Martínez el libro con el último informe de López Obrador.
A gritos otra vez, exclamó: “¡Qué viva México, que viva la dignidad, que viva la democracia!”
Luego, abandonó el salón en menos de cinco minutos y en la comisión de cortesía ya no la acompañó la panista Paulina Rubio, asignada entre otros a recibirla y despedirla.