Demanda a fabricantes de armas no va contra soberanía de EU: AMLO
Ciudad de México, 5 de agosto.- La demanda del gobierno mexicano contra empresas fabricantes de armas estadunidenses por las irregularidades en sus ventas que permiten que lleguen a México no es una situación de injerencia o en contra del gobierno del vecino del norte. Se trata de un procedimiento civil porque “nos afecta a todos que no haya control sobre la venta”, sostuvo este jueves el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Cuestionado en su conferencia de prensa de hoy sobre la denuncia anunciada el miércoles por la Secretaría de Relaciones Exteriores contra fabricantes de armas estadunidenses, el mandatario insistió que “no es ir en contra de la enmienda que le da el derecho a los estadunidenses de portar armas, sino la forma en que se fabrican y venden estas armas que llegan a nuestro país y causan muertes”.
A la medida del crimen organizado y venta por Internet
Recalcó que actualmente se ofertan hasta por Internet, y se trata de armas de alto poder que se introducen a territorio nacional, como el caso de modelos Barret 50 o armamento similar.
Además, “estas empresas hacen armas a la medida de los clientes en México que se dedican a la delincuencia organizada, con lujos en las cachas, especiales, y ellos lo saben que es para nuestro país el destino de esas armas”.
Confió que el juzgado en Boston resolverá el caso, aunque no necesariamente sería pronto, pero subrayó que una resolución favorable “ayudaría mucho” a la reducción de la violencia por el control de las armas, y es la primera vez que se hace un planeamiento así, “cuidadoso, con apegado a la legalidad y respetuoso de la independencia y las leyes de Estados Unidos”.
Se esperaba que empresas se deslindaran: SRE
La Asociación Industrial del Comercio de las Armas (NSSF, por sus siglas en inglés) rechazó ayer en un comunicado el litigio iniciado por el gobierno mexicano y lo tildó de acusaciones infundadas. Tras ello, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) señaló que “se esperaba que tratarían de litigar el asunto en medios y no en cortes donde ante un juez se tendrá que valorar la evidencia que existe actualmente”.
La SRE manifestó que casi todas las armas recuperadas en las escenas del crimen en México —entre el 70 y el 90 por ciento de ellas— se traficaron desde Estados Unidos.
Los demandados incluyen a los seis fabricantes basados en Estados Unidos, cuyas armas se recuperan con más frecuencia en México —Smith & Wesson, Beretta, Century Arms, Colt, Glock y Ruger. Otro fabricante demandado es Barrett, cuyo rifle de francotirador de calibre .50 es un arma de guerra apreciada por los cárteles de la droga. El acusado restante —Interstate Arms— es un mayorista del área de Boston, a través del cual todos los fabricantes demandados, excepto uno, ofrecen sus armas para su reventa a comerciantes de armas en todo Estados Unidos.
“Los demandados diseñan, comercializan, distribuyen y venden armas de forma que saben que arman a los cárteles de la droga en México”, aseveró la SRE.