«Odio desnudarme», aseguraba Sasha Montenegro

Sasha Montenegro considerada la actriz más bella del cine de ficheras y viuda de ex presidente José López Portillo, falleció el miércoles a los 78 años, confirmó la Asociación Nacional de Intérpretes (ANDI México). La legendaria vedete había tenido varios problemas de salud relacionado con el cáncer de pecho en sus últimos años.

«La Asociación Nacional de Intérpretes comunica el sensible fallecimiento de la socia intérprete Sasha Montenegro». A la reconocida actriz se le recuerda por la película germinal Bellas de noche (1975), cinta fundacional del género del llamado cine de ficheras, donde comparte protagónico con Jorge Rivero, ambos bajo la dirección de Miguel M. Delgado, donde la actriz se convirtió en la causante de las poluciones nocturnas de muchos jóvenes y de varias generaciones.

Participó en una cincuentena de cintas como Un sueño de amor, Pedro Navaja, Entre ficheras anda el diablo, Muñecas de medianoche, La vida difícil de una mujer fácil, Noche de cabaret, Blanca Nieves y sus siete amantes, Playa prohibida, Las glorias del gran Púas, Las cariñosas y Rumbera caliente, entre otras. A pesar de que las películas, ahora rebautizadas como sexicomedias, le dieron fama y fortuna ella siempre renegó de ellas: “me han dado una imagen de retrasada mental… odio desnudarme en películas tan corrientes”.

Pero la actuación de Sasha Montenegro no únicamente se circunscribió al cine de ficheras también actuó con El Enmascarado de Plata en los filmes: Santo y Blue Demon contra el doctor Frankenstein, Vampiros de Coyoacán y Santo contra la magia negra; en la sensacional película Llámenme Mike, dirigida por Alfredo Gurrola, largometraje que por cierto estuvo censurado por su profunda crítica a la policía de la época; y hasta participó en la cinta de culto Fe, esperanza y caridad dirigida por Jorge Fons, Luis Alcoriza y Alberto Bojórquez.

Aleksandra Aćimović Popović, su nombre real, nació una tarde de lluvia en 1946 en Bari, Italia, hija única del matrimonio de los migrantes de la entonces República Federal de Yugoslavia formado por Zivojin Aćimović y Silvia Popović, perteneciente a una familia aristócrata de Montenegro que fue asesinada en un campo de concentración nazi durante la Segunda Guerra Mundial. En 1969 viajó México por una oferta de trabajo en el cine, donde inició su carrera como actriz de fotonovelas y modelo y realizó una carrera de vedete entre las décadas de 1970 a 1990. Obtuvo la ciudadanía mexicana el 28 de junio de 1989.

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Cuando su carrera estaba en gran auge en los años ochenta, se involucró amorosamente con el político y entonces presidente José López Portillo, quien estaba casado con Carmen Romano y tenía tres hijos. López Portillo se divorció de Romano en 1991, y se casó en un matrimonio civil con Montenegro en 1995. De su unión nacieron dos hijos: Nabila en 1985, y Alexander en 1987.

Hay evidencia que el romance entre López Portillo y Montenegro arrancó en España cuando se encontraron casualmente en 1984 e iniciaron el coloquio amoroso y fue hasta inicios de los años noventa que contrajeron nupcias, y como regalo la actriz recibió la suntuosa mansión Colina del Perro, en Bosques de la Lomas en la Ciudad de México, y vivieron juntos hasta la muerte del ex presidente, ocurrida en 2004.

Tras la muerte de Jolopo, la actriz recibió la pensión a la que tenía derecho como viuda del mandatario, cifras dadas a conocer estiman que de 2004 a 2022 percibió casi 29 millones de pesos del erario.

En los 2000 Sasha comenzó a tomar distancia de la actuación y del mundo del espectáculo, dedicándose por entero a procurar a su hijos y al negocio de los bienes raíces. Por última ocasión apareció en la pantalla chica en 2018 en el programa matutino Hoy, transmitido por el Canal 2 de y sus últimos años los vivió en la ciudad de Cuernavaca, Morelos.

La muerte de Sasha Montenegro, según coinciden especialistas del medio de la farándula y el cine, «cierra una época, para unos triste y para otros importante del cine mexicano«.

Esta redacción trató de hablar con Nabila López Portillo, para conocer los pormenores del velorio, pero no hubo respuesta.