Fuego, agua, aire y tierra conviven en cinta de Disney
Elementos ya está en las salas de cine. Foto tomada de las redes sociales de Disney
Por: Juan Ibarra / La Jornada
La cinta número 27 de Disney Pixar es probablemente la historia más personal de Peter Sohn, un animador y cineasta que colabora desde hace casi 20 años con la compañía en distintos roles. Su nueva película, Elementos, se desarrolla en una ciudad ficticia y diversa donde conviven individuos de fuego, aire, agua y tierra; está inspirada en Nueva York, donde el creativo creció.
“Fue un proceso paulatino. Los personajes comenzaron como pequeñas ideas muy primitivas de lo que uno piensa sobre el fuego. Tienen una chispa creativa, son luminosos. El agua es transparente. Empezó así de simple, pero al comenzar a desarrollarlos, pones unas pequeñas partes de ti mismo. No era sólo yo, sino todo el equipo”, contó el director en conferencia virtual.
Sohn es hijo de migrantes coreanos; su vida ha estado plagada de contradicciones así como de las expectativas de sus padres. Partiendo de esa base, el equipo de producción agregó más capas a sus personajes. “Ember se volvió esta hija de segunda generación de migrantes, y eso empezó a colocarse por encima de sus pasiones, de su carácter y de su chispa creativa”, señaló Sohn. “Lo mismo sucedió con Wade. Fue como entender que estos dos personajes se estaban perdiendo de algo y luego empezar a averiguar qué los llenaría”.
La historia de Elementos se centra en el encuentro de sus protagonistas, Ember y Wade, una de fuego y el otro de agua. Sus diferencias no sólo son físicas, sino también sus personalidades, mismas que plantean nuevas posibilidades para ambos. “Ember arde con mucha intensidad, a veces demasiada. Es una mujer apasionada, joven e independiente muy cercana a su familia, tanto que tiene el sueño de quedarse con el negocio ésta”, puntualizó Leah Lewis, quien da voz al personaje en su idioma original.
“Al principio vemos por qué el fuego y el agua no se llevan bien, digo, hay mucho en riesgo para ellos, incluso sólo interactuando. Podrían literalmente extinguirse entre sí, pero también, como son tan diferentes, no pueden socializar de una manera normal con otros elementos”, agregó.
Un ser realista y optimista
Su contraparte, Wade, fue interpretado por Mamoudou Athie, quien considera al personaje un ser realista y optimista. “Él escoge vivir de una forma muy honesta, y digo ‘escoge’ porque no es seguro que su naturaleza sea emocional. Creo que busca ver lo positivo en todo y en todos. Es una de mis cosas favoritas sobre él”, sostuvo el intérprete.
Para el director de la película, transmitir esos rasgos era central. “Siempre busco empatía y carisma en la voz, y en cómo conectar con eso. Por su puesto, buscas lo que necesitas, o lo que crees que el personaje necesita. Hay otro factor clave, que serán capaces de llevar al personaje más allá de lo que jamás podríamos imaginar”.
En tanto, para el estudio de animación, elaborar personajes con características físicas especiales también fue un reto a nivel técnico. Mientras que de forma normal un protagonista de Pixar cuenta con alrededor de 4 mil controles, los de Elementos requirieron casi 10 mil.
“Hay tantas capas de efectos en estos personajes que los retos se multiplicaban hacia cualquier dirección que fueramos. Por ejemplo, el fuego no tiene sombra, así que por eso había cuestiones en cada escena, cada toma, en la que sólo tratábamos de asegurarnos que sus ojos fueran en la dirección correcta”, detalló el director.
Mamoudou Athie destacó: “Estoy muy agradecido porque el amor es palpable en cada cuadro de esta película”.
Lewis añadió: “Espero que la gente se vaya con la pieza que le faltaba y que no estaba segura que estaba ahí. Que deje que esa parte brille, y la gratitud por las personas que están en su vida”.
Elementos ya está disponible en salas de cine.