El Inbal rendirá un homenaje póstumo a la pianista Olivia Revueltas
La pianista y compositora Olivia Revueltas, figura pionera del jazz en México, recibirá un homenaje póstumo el 14 de agosto en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, según acordó ayer con la familia el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal).
El deceso de la también poeta y pintora –facetas poco conocidas de ella– acaeció el viernes a los 73 años en la capital del país, a consecuencia de un mal cardiaco, precisó a La Jornada su hija Kayani, quien aseguró que la artista se mantuvo entusiasta y activa hasta el último momento, pues planeaba un concierto en la sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario y otro en la Fonoteca Nacional.
De igual manera, agregó, preparaba un nuevo álbum, el tercero en su haber, al tiempo que trabajaba en la recopilación de su obra poética, que va desde su juventud temprana hasta tiempos recientes, para publicarla en un libro.
Ahora serán los tres hijos de la maestra, entre ellos el guitarrista Julio Revueltas, quienes se ocuparán de concretar ambos materiales, el fonográfico y el poético.
Por supuesto que lo haremos, con todo amor. El libro de poesía aún no tenía título, apenas estábamos juntando los poemas, que abarcan toda su vida, desde los 15 años, que comenzó a escribir, hasta hace poco
, indicó Kayani Revueltas.
“Además pintaba y hacía collage; era una artista muy completa. El disco ya lo dejó armado. Primero queremos estar tranquilos y después nos reuniremos los tres hermanos (además de los mencionados, Vina) para hacer el acopio de toda su obra y empezar a decidir qué se irá haciendo poco a poco.”
Abrió camino
A decir de la escritora, Olivia Revueltas es un icono del jazz en México, que abrió las puertas de ese género a las mujeres en un momento muy difícil, y unificó el papel de éstas dentro de esa expresión
.
Otros de sus legados, aseguró, fueron el compromiso y la coherencia en lo personal y lo artístico: Nos enseñó que había una Olivia para el escenario, una Olivia mamá, una Olivia compañera de lucha, que fue la que más me tocó a mí, y una Olivia en muchas facetas. Entonces, lo que nos enseñó fue a darnos de forma completa, en cada una de nuestras áreas, no hacerlo de forma mediocre, por pedacitos
.
Agregó: Nos enseñó a entregarnos por completo y de forma honesta, y eso aplica en lo personal y lo artístico, pero también en el compromiso social. Me di cuenta de que con su música sanaba, tocaba los corazones, además de que era una mujer, mucha gente lo sabrá, que siempre daba consuelo a quien la buscaba. Era muy fuerte, poderosa, pero también muy dulce
.
Nacida en la Ciudad de México el 17 de julio de 1951, Olivia Revueltas Peralta fue siempre una artista comprometida y combativa, que se destacó por su talento, carisma y personalidad intensa y vehemente, acorde con su linaje familiar. Revueltas, al fin y al cabo.
Hija del escritor José Revueltas, además de sobrina del compositor Silvestre Revueltas y el pintor Fermín Revueltas, a los 23 años comenzó sus estudios autodidactas, específicamente de jazz, para iniciar su carrera profesional en 1978.
En la década de 1980 creó y digirió en Casa del Lago el ciclo Jazz de 5 a 7, que se mantuvo durante siete años y a través del cual logró el registro sonoro de las figuras más importantes del género en México.
Después de participar en una huelga de hambre de 10 días en el Zócalo en apoyo a campesinos indígenas, decidió autodesterrarse
y vivir en Estados Unidos, donde permaneció durante 25 años.
Sus restos, tras ser velados, fueron incinerados ayer; las cenizas se mantendrán en su casa, en la capital del país, en cumplimiento de sus deseos.
Era una romántica de la vida abrazando a la muerte. Empezó a decir lo que quería para el día en que muriera. Desde hace tiempo me compró este vestido, que ahora porto; quería que lo usara en esta ocasión
, compartió Kayani Revueltas.