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Muerte de “El Gordo” desata ola de violencia en Zacatecas

Por: Alfredo Valadez Rodríguez

Zacatecas, 7 de mayo. – La muerte de “El Gordo”, presunto jefe del Cártel de Sinaloa en Zacatecas, durante un enfrentamiento con policías y militares en una comunidad rural del municipio de Fresnillo, desató una escalada de violencia que inició la tarde del domingo y continuó hasta este martes en la entidad.

En tres días se han incendiado decenas de vehículos y realizado por lo menos bloqueos en 20 puntos de distintos tramos carreteros, además de cuatro enfrentamientos entre comandos de esa organización criminal y elementos de la Policía Estatal Preventiva, que apoyados por la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano, detuvieron a 26 pistoleros y les decomisaron armas largas, vehículos y droga.

No hay reporte de bajas entre policías y militares, sin embargo, el saldo hasta el momento es de por lo menos 16 personas asesinadas, presuntamente por el Cártel de Sinaloa, y supuestamente pertenecían a un grupo delictivo rival.

La madrugada de este martes, sujetos armados abandonaron los cuerpos de nueve personas en la ciudad de Fresnillo “con mensajes dirigidos a un grupo antagónico”. Cinco cadáveres se dejaron sobre la avenida Manuel Varela Rico, frente a la Central de Abastos. Otras cuatro víctimas, envueltas en cobijas, quedaron sobre el bulevar Paseo del Mineral, frente a un centro comercial.

Otro hombre cuyo cuerpo fue desmembrado se dejó a la orilla de la carretera federal número 118, en la comunidad de Cieneguitas, al sureste de la zona conurbada de las ciudades de Guadalupe y Zacatecas.

El lunes pasado fueron seis las personas que murieron violentamente, derivado de los enfrentamientos con policías y entre grupos delictivos: dos maniatados y baleados en el municipio de Pánfilo Natera; otros dos fueron colgados de un árbol en el municipio de Valparaíso, y dos más, murieron quemados en el interior de los tractocamiones incendiados en el bloqueo de la carretera que comunica a Fresnillo con Sombrerete.

En una conferencia de prensa vespertina -este martes- que encabezaron en el palacio de Gobierno del Estado, el general Arturo Medina Mayoral, secretario de Seguridad Pública de Zacatecas; Óscar Alberto Aparicio Avendaño, subsecretario operativo; y Cristian Paul Camacho Osnaya, titular de la Fiscalía General de Justicia de la entidad, se ofrecieron los pormenores de los sucesos ocurridos en tres días.

En la reunión con los representantes de los medios de comunicación, se informó además del arribo de cientos de elementos de la Guardia Nacional, que llegaron para reforzar la seguridad y ampliar el despliegue de las operaciones policiacas, para contener la acción de los delincuentes. Asimismo, trascendió que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) envió este martes un helicóptero Black Hawk, artillado, para el combate a los grupos delincuenciales “de día y noche”.

Por separado, Rodrigo Reyes Muguerza, secretario general del gobierno estatal, calificó los bloqueos carreteros con tráileres incendiados como “una reacción virulenta”. En una entrevista comentó: son “reacciones normales” derivadas del combate frontal que realizan las autoridades contra los grupos de la delincuencia organizada para instaurar la paz en Zacatecas.

Reyes Muguerza reveló que contrario a lo que ocurría en gobiernos de sexenios pasados en Zacatecas, la actual administración que encabeza David Monreal Ávila, sí está haciendo frente a los grupos delictivos, y prueba de ello es que, en los tres días de confrontación, ya han sido detenidos 26 presuntos delincuentes “de una misma organización criminal”, que han participado en los enfrentamientos armados contra policías estatales, o bien que han intervenido directamente en la realización de bloqueos carreteros.

Los bloqueos

Quince narcobloqueos en distintos puntos carreteros que cruzan once municipios de Zacatecas, en los que fueron utilizados alrededor de 30 tractocamiones, camionetas tipo pick up y autos particulares, así como el asesinato de seis personas, y la detención de 13 presuntos delincuentes, fue el saldo sólo del lunes.

Esa mañana, los integrantes de la Mesa para la Construcción de la Paz, incluidos funcionarios del gabinete de Seguridad Pública del estado y de fuerzas federales: Guardia Nacional y Ejército Mexicano, se reunieron a puerta cerrada en la ciudad de Fresnillo durante más de cinco horas para hacer un balance de la ola de violencia que provocó caos vial y temor entre miles de automovilistas.

En los tres enfrentamientos armados que se habían dado hasta la tarde del lunes, se reportó la incautación de siete armas largas, cuatro vehículos, dos chalecos balísticos, una cubeta con estrellas poncha llantas, un uniforme y un par de botas tácticas. Además, un delincuente fue abatido.

Entre los detenidos en el municipio de Villa Hidalgo, tras participar en la quema de vehículos, se encuentran Jesús Yahir “N”, de 20 años de edad, originario de Sinaloa y un menor de 15 años, de Durango; Juan “N” de 19 años y Felipe “N” de 27 ambos también de Durango; así como Luis Fernando “N” de 24 años y Juan Pablo “N” de 47, originarios de Durango y Chihuahua respectivamente.

Los detenidos forman parte de un grupo muy extenso que participó en la intercepción, despojo y quema de vehículos –en algunos casos simultáneos-, en 11 municipios del norte, centro y sureste de Zacatecas.

Las células delincuenciales habrían asesinado hasta el lunes por la tarde seis personas: dos hombres que, con signos de tortura, maniatados y con heridas de bala, fueron dejados a un costado de la carretera federal número 49, justo en los límites de Zacatecas y San Luis Potosí.

Dos hombres más murieron calcinados, en dos de los camiones de transporte de carga que fueron secuestrados y quemados sobre la carretera Fresnillo – Sombrerete, a la altura de la comunidad de Río Frío. Y otros dos más fueron asesinados a un costado de la carretera federal 44, justo antes de llegar a la cabecera municipal de Valparaíso, donde las dos víctimas, aún no identificadas, fueron colgadas de árboles.

A pesar de la fuerte reacción del cártel- que ya se prolongó tres días- el general Arturo Medina Mayoral, titular de la SSPZ, declaró que “en Zacatecas no se dará ni un paso atrás, en la consolidación de la Paz”.

La quema de vehículos y los ataques han sido muy aparatosos, entre ellos el de un camión de carga justo en la caseta de peaje de Calera –punto intermedio entre las ciudades de Fresnillo y la capital Zacatecas-, donde los delincuentes además balearon y destruyeron tres “islas” de cobro. Muy cerca de ese sitio, además, los pistoleros quemaron un tráiler de doble remolque que transportaba cerveza, y junto a ese vehículo una camioneta y un automóvil, de particulares.

El ultimo infierno zacatecano empezó alrededor de las 18:30 horas del pasado domingo en la comunidad Emiliano Zapata, municipio de Saín Alto, al noroeste de la entidad, cuando se produjo un enfrentamiento armado y persecución entre integrantes de las Fuerzas de Reacción Inmediata de Zacatecas (FRIZ), agrupación perteneciente a la Policía Estatal Preventiva, contra presuntos delincuentes.

Minutos más tarde, un convoy de sujetos armados que viajaban en camionetas pick up interceptó a los choferes de siete automotores, entre tráileres y vehículos particulares, en distintos tramos de la autopista Zacatecas – San Luis Potosí, bloqueando temporalmente los carriles de esa carretera en ambos sentidos, a la altura de las comunidades de El Saladillo y La Blanca, del municipio de Pánfilo Natera, y en Las Arcinas, municipio de Trancoso.

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