Realizan operativo en Lomas Taurinas; posible reapertura del caso Colosio
Tijuana, 28 de abril .- Elementos de la Fiscalía General de la República realizaron un operativo en Lomas Taurinas de esta ciudad donde el entonces candidato presidencial priista Luis Donaldo Colosio fue asesinado en 1994.
El área fue cerrada por varias horas también con presencia de elementos de la Guardia Nacional y aunque no se informó el motivo del operativo, trascendió que pudo tratarse de una reconstrucción de los hechos ocurridos el 23 de marzo de hace 29 años.
Los elementos federales acordonaron el área donde Colosio realizaba un mitin cuando fue atacado y que actualmente está ocupada por una plaza y monumento.
Los hechos ocurren en el contexto de la reapertura del caso con la hipótesis de un complot o acción concertada, y no la del asesino solitario, por la que Mario Aburto Martínez cumple una sentencia de 45 años de cárcel.
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El 26 de octubre de 2021, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), mediante una recomendación, pidió a la FGR realizar una nueva investigación del caso que está encaminada al análisis de las violaciones de derechos humanos -torturas- denunciadas por la familia de Mario Aburto. Dos días después, el 28 de octubre de 2021, el presidente Andrés Manuel López Obrador ofreció la protección del Estado al “asesino confeso” de quien fuera candidato del PRI a la presidencia de la República.
En julio del año pasado el Consejo de la Judicatura Federal informó que la Fiscalía General de la República (FGR) había pedido la reapertura del caso.
En un comunicado de prensa dijo también que además se integró un equipo especial para investigar los hechos y retomar los procesos penales contra las personas vinculadas en el caso. Mario Aburto es en este momento la única persona encarcelada por ese magnicidio; en marzo pasado un juez federal le concedió un amparo por la omisión de la FGR de investigar presuntos actos de tortura de que fue objeto para que se declarara culpable.
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El titular de la FGR, Alejandro Gertz Manero, ordenó la integración de un equipo especial compuesto por fiscales y agentes de la Policía Federal Ministerial para enfocarse en la “investigación exhaustiva de los hechos” registrados en Tijuana, el 23 de marzo de 1994.
Según el comunicado del CJF, el caso fue asignado al fiscal Abel Galván Gallardo, extitular de la Fiscalía Especializada en Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada.
El año pasado, el nuevo equipo solicitó a la Cámara de Diputados copias del expediente que fue integrado por la Comisión Especial para el Caso, que se creó en medio de las muchas dudas y desfile de fiscales que atendieron el caso en los primeros años.