Más propuestas y menos pleitos, la estrategia de campaña de Miguel Ángel Badiola

Tijuana, 30 de abril.- La vida política del estado se volvió “puro pleito y pura crítica; por eso yo no voy a hablar mal de ningún candidato, ni voy a criticar a los gobiernos ¡de eso ya está harta la gente! La gente ya no quiere pleitos, diferencias, quiere ver que trabajen juntos por el bien de todos”, resume su estrategia de campaña Miguel Ángel Badiola, candidato a la presidencia municipal del Partido Encuentro Solidario (PES).

Publirelacionista nato, Badiola cree en el diálogo y las buenas maneras; “los políticos representan a los mismos bajacalifornianos, a los mismos tijuanenses… hay una falta de sensibilidad respecto de lo que realmente es importante”, dice durante una entrevista a la que llega después de una mañana de campaña, sensibilizado por las condiciones de pobreza que vio en El Niño, una colonia donde las aguas negras corren por las calles, los vecinos de otras colonias les van a tirar la basura… sin servicios básicos.

En principio, se define: “No soy político, soy un ciudadano”, así que de alcalde se ve como un “gestor” de los tijuanenses, que no se va a pelear con nadie y trabajará con los gobiernos de cualquier color y con los empresarios.

Recuerda que siempre ha sido un conciliador, sus acuerdos con Jaime Bonilla (un hombre con fama de difícil) y con un Secretario de Gobernación para que le permitieran reabrir los restaurantes en los días de pandemia. Entonces era presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera (CANIRAC), delegación Tijuana, y “los trabajadores del sector estaban literalmente muriendo de hambre”.

“Eso te dice que Miguel Ángel Badiola, gracias a las relaciones públicas, que son mágicas, puede llegar a acuerdos con el gobierno que sea”, explica el candidato, quien estudió hotelería y gastronomía en San Diego (de ahí sus negocios en la industria restaurantera), pero ha sido el director corporativo de relaciones públicas del Grupo Caliente, del municipio de Tijuana y del gobierno del estado, éste ultimo puesto hasta hace dos meses.

¿Necesita el municipio de Tijuana un publirelacionista ?

-Totalmente, estoy convencido. La politica estará, pero yo cuando llegue con el favor de Dios y los votos de la ciudadanía no voy a llegar para beneficiar al PES (Partido Encuentro Solidario). El PES es el vehículo que me lleva y conduce, pero una vez que llegue yo veré por los tijuanenses y veré por todos. Se han sorprendido porque he dicho que voy a constituir el primer grupo consultor de ex presidentes municipales.

-¿Cómo le va hacer para sentarlos a todos?

Tengo la capacidad para el día que tome protesta convocarlos. Ahí van a estar sentados, empezando por la actual presidenta municipal. No todo lo que han hecho es malo. Ese es otro error, descalificar, hay que darle continuidad a los programas y no hay que ir a descubrir el hilo negro.

-¿Cuando le pregunta a la gente cuál es el principal problema de Tijuana qué le dice?
-No dicen que la inseguridad -como muchos pensaríamos-. Te dicen; la movilidad, que ya no es un problema solamente ecológico para la ciudad -por la cantidad de contaminantes que genera tener un mundo de vehículos parados pero con el motor andando todo el día-, o de afectación al desarrollo económico, sino de daño psicológico y emocional para quienes, por ejemplo, van todos los días a trabajar del otro lado. Tres horas de fila para pasar, 8 de trabajo y otras tres para regresar… ¿cómo llegas a tu casa? Hay que empezar por lo que no cuesta: sincronizar los semáforos, desaparecer el Sistema Integral de Transporte de Tijuana (SITT), para liberar el carril…

-Y con la policía, con la seguridad ¿qué va a pasar con ellos?

-¿Qué podemos esperar de los policías, recibir de ellos, sino les damos nada. No les damos seguridad social a ellos y sus familias, un sueldo digno… ¿cuántos años tenemos escuchando que les van a poner cámaras? ¿por qué no se las han puesto? Es un mecanismo para el control de la corrupción; si el policía o el ciudadano incurren en una falta ahí quedará grabado. De los 2400 policías qué hay en Tijuana 400 están incapacitados, de vacaciones, en actividades administrativas de permiso, etc… quedan 2 mil. Y la ciudad necesita 7 mil… eso te puede dar una idea de por dónde empezar.

“Lo primero es voltear a ver a la policía, voltear a verla, porque ni siquiera la ven, como a la burocracia. Qué pasa con la burocracia, qué nadie quiere saber nada y cada año vemos que andan mendigando 2,3 por ciento de incremento salarial ¿cómo les puedes pedir seguridad sino les das seguridad?”

Por ejemplo, ¿qué tan grande es Playas de Tijuana? -primer lugar en robo a casas habitación de la ciudad- ¿Y los tres ordenes de gobierno no se pueden coordinar?, es pregunta ¿será falta de presupuesto? ¡Nooo! Es pura falta de coordinación, de voluntad para hacer las cosas. Hay que ir con las contrapartes del gobierno y decirles; “oye, tenemos que hacer algo, vamos juntos, porque gobernamos a los mismos”. Ahorita gobierna el mismo partido. Antes le echaban la culpa que los tres niveles de gobierno no eran del mismo partido. Las promesas de todos son las mismas y los resultados de todos los mismos.

“Aquí estoy como ciudadano, tengo que aventarme, tengo que decirles que vayamos por una Tijuana unida, y que se acabo la división; que tengo la capacidad de conciliar dandole a la gente su lugar, tocando la puerta, pidiendo, y hablando, porque es para beneficio de la sociedad. En el 2020 convencí a todos de sacar las mesas y las sillas a las banquetas, de que nos permitieran funcionar con 30 por ciento de aforo, como lo hizo el primer mundo, fuimos el primer estado del país que lo logro.

Miguel Ángel Badiola Montaño nació en la calle Ocho, en el centro de Tijuana, de madre tijuanense y de padre migrante; “mi papá salió de España por necesidad a los 16 años, llegó a Tijuana como jugador de frontón, era pelotari, de un sitio muy cerca de San Sebastián (capital del país Vasco). Esta ciudad le dio la oportunidad de sacar adelante a sus padres, cuando España estaba fregadísima. A mi me ha dado la oportunidad de todo, de formar una familia. Mis hijos Estivalis e Iñaki me toman fotos todo el día, así que mi vida es muy transparente.

La avenida Revolución, el Jai Alai y el Chiki Jai (restaurante del centro) , fueron mi segunda casa.

“No podemos seguir dividiendo a la sociedad: por eso mi lema es Por una Tijuana unida. Qué los de la zona este, qué los del centro ¡no!… hay que trabajar para toda la ciudad, hay que sumar para llevar agua, luz, recoger la basura, un mejor transporte y vialidades, para todos”.