Celular de Servando llevó a la detención de presuntos responsables de su desaparición
Tijuana, 3 de septiembre. El vehículo que se usó para tirar el teléfono celular de Servando Salazar Cano en una plaza comercial pertenece a uno de los detenidos por la desaparición del trabajador en las instalaciones de maquiladora Prime Wheel, reveló la fiscal general del estado, María Elena Andrade Ramírez, quien no descartó que el móvil del delito sea el robo de aluminio de la empresa que se dedica a la fabricación de rines de automóviles.
En conferencia de prensa ratificó que continúan con las investigaciones al interior de la planta ubicada en el parque industrial Chilpancingo, donde un agente canino encontró indicios de sangre, y reveló que el seguimiento de los videos de vigilancia permitió detectar que el vehículo -un Jeep Chrysler de modelo reciente- estaba en la planta y fue movido hacia la plaza comercial en el ínter de la desaparición de Servando Salazar el pasado 23 de septiembre.
Las investigaciones en torno a este hecho llevaron a la detención de Moisés «N» y José Alfredo «N», el primero ingeniero y el segundo supervisor general de hornos de fundición, hornos de desecho y maquinado, quienes laboraban en la nave uno donde Servando desapareció.
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Esa área, explicó la fiscal, es de acceso restringido pues son hornos «de una densidad e intensidad tan alta como para fundir cualquier metal, que están en constante actividad y además uso de productos altamente corrosivos o letales».
Confirmó que la víctima, quien era gerente de mantenimiento, envió mensajes a sus familiares unos minutos antes de que el teléfono fuera arrojado en el estacionamiento de la plaza comercial Santa Anita, ubicada cerca de la empresa cuyas instalaciones son intervenidas por la FGE y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).
Al reconocer que un agente canino encontró indicios de sangre en un punto de la empresa, la funcionaria afirmó que por el momento no puede darse por muerto a Servando Salazar, y en caso de que así fuera, por respeto su familia sería la primera en saberlo.Sobre la hipótesis de que el robo de aluminio pudiera ser el móvil de la desaparición, dijo que la posibilidad de actividades ilícitas que mencionó en una conferencia de prensa previa es una de las líneas de investigación; aseguró que las personas involucradas tienen que ser mandos altos para tomar decisiones.
Recompensa de medio millón
A los dos detenidos -el pasado 30 de agosto- se les imputó por el delito de desaparición cometida por particulares, por el cual podrían alcanzar hasta 50 años de prisión. El jueves se llevará a cabo la audiencia de vinculación mientras sigue vigente una pesquisa de búsqueda con promesa de recompensa de 500 mil pesos a quien dé información que lleve a la ubicación del trabajador.
Mientras tanto la familia de Servando Salazar Cano exige que se dé con su paradero, pues desapareció estando en plena jornada laboral el viernes 23 de agosto, y nunca se le vio salir de la empresa.
Su esposa, Wendy Bravo, ha exigido que se investigue hasta dar con Servando, quien cumplirá 35 años, es padre de familia y está a punto de tener otro hijo.
Wendy Bravo denunció este martes que el vehículo de su esposo, el cual se encontraba en un corralón, fue desvalijado, además de que ella tuvo que pagar 5 mil pesos por el arrastre y la llave para abrirlo.
«Es una injusticia que nosotros estemos devastadas POR LA DESAPARICIÓN DE SERVANDO SALAZAR CANO y todavía se tomen el atrevimiento de abrir la camioneta los corralones y la vacíen, es una impotencia tan grande que siento en este momento por que SON COSAS DE MI GORDO», escribió en su cuenta de Facebook.
«ES UNA IMPOTENCIA Y CORAJE POR QUÉ ACCEDÍ PARA las investigaciones donde se supone que deben PRÁCTICAMENTE mantenerla en custodia por lo que está pasando».
