Buscó a su hijo 5 años y lo halló en la fosa común; acusa omisión de Semefo
Tijuana, 2 de mayo. Un «error» de personal del Servicio Médico Forense (Semefo) que omitió tomar una muestra de de ADN a su hijo, que se encontraba en las instalaciones desde el 6 de septiembre de 2018 le costó a María Guadalupe García Hernández cinco años de incertidumbre, jornadas de rastreo y ahora 90 mil pesos que pretenden cobrarle por recuperar los restos.
Narró que el 4 de septiembre de ese año reportó la desaparición de su hijo y aunque estuvo buscándolo y se unió a los colectivos de búsqueda para tratar de ubicarlo en una fosa clandestina, finalmente lo halló, pero en una fosa del gobierno.
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Se dijo frustrada y enojada por los años de incertidumbre, incluidas varias ocasiones en que acudió a entregar pruebas genéticas para que se hiciera cotejo con los cuerpos que llegan al Semefo, que tuvo que pasar antes de localizar a su hijo, calificó de ineficiente el trabajo de funcionarios, de quienes afirmó “solo van a calentar la silla y a cobrar su salario”.
García Hernández acusó que la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, el fiscal Iván Carpio Sánchez y el resto de los funcionarios son insensibles al dolor de las familias que buscan a alguna persona desaparecida.
Incluso recordó que cuando buscaba a su hijo, empleados de la Fiscalía General del Estado le decían que el muchacho «es un malandro» y pronto regresaría a su casa.