Trabajadores de Luxshare votan a favor de contrato colectivo
Tijuana, 11 de septiembre. Los trabajadores de la planta Luxshare, ubicada en el Parque Industrial Chilpancingo, aprobaron su primer Contrato Colectivo de Trabajo con el Sindicato Independiente Nacional de Trabajadoras y Trabajadores de la Industria Automotriz (SINTTIA), convirtiéndose en el primer sindicato independiente que logra consolidar un contrato desde 1998.
La votación para aprobar las cláusulas del contrato se realizó los días 27 y 28 de agosto pasado.
“No hay líderes, simplemente compañeros en lucha”, afirma Adriana Medina Chávez, trabajadora con 20 años de antigüedad en la empresa, quien junto a Francisco Rincón, técnico de la compañía, formó parte del movimiento que llevó a SINTTIA a ganar la representatividad el pasado 5 de marzo.
La transición de Bose Corporation a Luxshare, cuyos nuevos dueños son de origen chino, fue el detonante que encendió las alarmas entre los aproximadamente dos mil trabajadores de la planta.
“En la transición de la empresa hubo muchos detalles que prendieron las alarmas como el cambio de la razón social”, explica Medina, quien recuerda que la “hostigaban por simplemente preguntar qué iba a pasar con nosotros en las juntas”.
Eso no la detuvo. Cuando la mandaban llamar a Recursos Humanos, ella “les explicaba que no era portavoz y que si le iban a decir algo en contra de la movilización sindical lo tenían que hacer frente a todos”.
Las problemáticas laborales que enfrentaban los trabajadores iban desde restricciones básicas hasta abusos de autoridad.
“Permisos para ir al baño ya que hay personas con enfermedades, prepotencia de supervisores, que no les permitían tomar sus vacaciones ya que las habían cumplido”, enumera Adriana, quien añade: “en 25 años que llevo trabajando las condiciones han sido las mismas”.
“Cuando la empresa aún era Bose cerraban en diciembre y pedían a los empleados que tomaran sus vacaciones durante el cierre”, denunció Francisco.
La búsqueda de representación sindical llevó a los trabajadores hasta la organización Casa Obrera de Baja California, donde recibieron asesoría.
“Vimos la opción del sindicato, aquí en Casa Obrera nos asesoraron sobre varios sindicatos pero el que más nos convenció fue SINTTIA”, explica Francisco.
El Centro de Investigación Laboral y Asesoría Sindical (CILAS) apoyó en la redacción del contrato colectivo, tarea que realizó Willebaldo Gómez Zuppa, economista por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Sin embargo, el paso más difícil fue obtener las firmas necesarias.
“De los mil trabajadores tenían que tener el 30 por ciento porque lo hicieron clandestinamente”, recuerda Adriana, y añade: “tenemos ese derecho a organizarnos, pero no podíamos hacerlo dentro de la fábrica”.
La empresa no se quedó tranquila ante el proceso de organización. Francisco relata que “empezaron a liquidar a las personas que formaban parte del levantamiento de firmas, vigilaban a quienes levantaban la mano en la junta”. La estrategia incluía falsas liquidaciones “por necesidades de la empresa”, mientras que un martes corrían a 10 personas y miércoles contrataban 15.
“La desinformación jugó un papel muy importante”, dijo Adriana, quien señaló que muchos trabajadores, provenientes del interior de la república, desconocían sus derechos laborales, y la empresa se aprovechó de eso.
El nuevo contrato colectivo incluye mejoras significativas en las condiciones laborales:
- Paros técnicos: Los trabajadores ya no serán forzados a tomar sus vacaciones en diciembre durante los cierres de planta.
- Aumento salarial: Siete por ciento adicional, diferido en dos etapas, dos por ciento en octubre y cinco por ciento en diciembre.
- Retiro digno: Para trabajadores con más de 16 años de antigüedad y 60 años cumplidos.
- Permisos especiales: Tres días con goce de sueldo para matrimonio.
- Permisos para cuidadores: Sin goce de sueldo para quienes acrediten ser cuidadores de adultos mayores o enfermos.
- Celebración del Día de las Madres: Preferencia por disfrutar el 10 de mayo en familia en lugar del convivio empresarial.
- No cambio de turno forzoso: Los trabajadores pueden negarse a rotaciones constantes de horarios.
Este último punto es significativo para Adriana, quien comenta que le cambiaron de turno tres veces en un solo año.
Los efectos del nuevo contrato ya son visibles. Según los trabajadores, por el momento Luxshare se ha mostrado accesible y actuando conforme a la ley. Los cambios más notables se observan sobre todo en la actitud de los supervisores de línea, algunos de los cuales no querían otorgar permisos, sin embargo, tras reportarlos, ya fueron requeridos a Recursos Humanos.
Sin embargo, el cambio no es instantáneo. “Tenemos que cambiar la conciencia de nuestros compañeros. Tú puedes ir al baño las veces que quieras”, puntualiza Adriana, reconociendo que aún hay empleados que viven con temor ante el desconocimiento.
Francisco es consciente de que los tienen en la mira porque algunos sienten que el sindicato es una piedra en el zapato para dar los mismos resultados, que lograban sacar gracias a explotar a la gente.
“Es una responsabilidad muy grande”, afirma Francisco sobre ser el primer sindicato independiente en Tijuana desde 1998, y reconoce que esto podría ser “un parteaguas para que otros trabajadores de otras maquilas busquen su bienestar”.
María Alejandra Morales Reynoso, secretaria general del SINTTIA, declaró en un comunicado: “este triunfo demuestra que la organización sindical auténtica es la única capaz de garantizar que las y los trabajadores defiendan sus derechos colectivos. A diferencia de los sindicatos corporativos, nuestro sindicato nace de la base trabajadora y responde únicamente a su voluntad”.
“Tenemos que hacer que esto funcione para el beneficio de todos”, subraya Adriana, mientras los trabajadores esperan únicamente el fallo del centro de gobierno para poder instalarse y decidir quiénes serán los representantes.
Ellos demostraron que, como remata Adriana, no quieren “ser vistos como robots, como máquinas, como desechables, como yonkeadas”, sino como seres humanos con derechos y dignidad laboral.