¿Por qué tiene ventaja el equipo que juega como local? Esto dice la ciencia
Ciudad de México 23 de mayo 2024. Un hecho estilizado en el futbol es la ventaja del equipo local. En mayor o menor medida esta situación se observa en todas las ligas del mundo. En el caso mexicano, con datos de 2016 a 2021, en promedio el equipo local obtuvo alrededor de 0.5 puntos por partido más que el equipo visitante. Esta ventaja no es trivial. Si consideramos que el torneo mexicano consta de 17 jornadas, un equipo que sólo jugará de local obtendría alrededor de 8.5 puntos más por torneo que un equipo que siempre fuera visitante.
Pero, ¿de qué depende que les vaya mejor a los equipos locales?
Una reciente investigación de César Velázquez Guadarrama, del Departamento de Economía de la Universidad Iberoamericana, analiza este hecho para el futbol mexicano. El autor sostiene que investigaciones de este tipo ayudan a entender mejor el fútbol de nuestro país y a que la discusión y análisis del mismo se base en evidencia empírica relevante y no en ideas preconcebidas o en datos del futbol europeo.
Las causas que generalmente se presentan para explicar la ventaja del equipo local son la presión ejercida por el público, la familiaridad con el terreno de juego, la distancia y fatiga del viaje y la territorialidad.
La presión social afecta el comportamiento de los individuos pues las personas no sólo responden a incentivos monetarios, sino también a incentivos provenientes de las normas e interacciones sociales y contextos culturales. En el caso del futbol, la presión del público, se argumenta, produce un mayor esfuerzo en los jugadores locales y obliga al entrenador a tomar actitudes más ofensivas. De igual forma, la presión de los aficionados, quienes suelen favorecer al equipo local, afecta de manera inconsciente las decisiones de los árbitros.
Con relación a la familiaridad del terreno, es posible que esto tuviera un mayor impacto hace algunos años cuando los campos eran muy diferentes. En la actualidad hay mucho mayor calidad y homogeneidad en los mismos. A pesar de lo anterior sigue siendo cierto que factores como la luz o sombras que se generan a la hora que se juega o pequeños defectos del terreno puedan seguir influenciando el resultado de un partido.
El viaje del equipo visitante provoca que sus jugadores salten al terreno de juego más cansados debido al viaje realizado. Asimismo, dado que muchas veces se viaja uno o dos días antes del partido, los equipos visitantes tienen menos tiempo para entrenar.
La distancia recorrida por el equipo visitante y la diferencia de altitud son dos variables que influyen en el resultado de los partidos. En este sentido los equipos que viajan más, como Tijuana, resultan más perjudicados.
De la misma forma, los equipos de la Ciudad de México se ven beneficiados en el sentido que en sus visitas en dos partidos no tienen que viajar (en los enfrentamientos entre América, Pumas y Cruz Azul) y otros cuatro los tienen a menos de 200 kilómetros (Puebla, Pachuca, Toluca y Querétaro) y que, salvo el caso de Toluca y Pachuca, la Ciudad de México se encuentra a una mayor altitud que el resto de las ciudades en las que hay equipos de primera división.
El principal resultado del estudio es que un mayor número de espectadores en el estadio no le da mayor ventaja al equipo local. Este resultado es contrario a lo encontrado en Europa para las principales ligas de fútbol en las que la presión de los aficionados asistentes al estadio es un determinante de la ventaja del equipo local.
Un segundo resultado es que los árbitros sí muestran más tarjetas amarillas cuando el estadio está más lleno, pero lo hacen tanto para el equipo local como para el visitante. Otra vez, este resultado es diferente a lo encontrado para las ligas europeas en las que los árbitros, ante un mayor número de aficionados, tienden a mostrar más tarjetas amarillas al equipo visitante que al local.
Los resultados anteriores explican porque, contrario a lo que sucedió en Europa, la ventaja del equipo local no disminuyó en la pandemia. En México, se anotaron menos goles durante los partidos a puerta cerrada, pero permaneció sin grandes alteraciones la ventaja del equipo local. En Europa la ventaja del equipo local disminuyó a la mitad en los partidos a puerta cerrada.
El autor finaliza el estudio aludiendo a un elemento que no se investigó, pero que hay que tomar en cuenta para entender la ventaja del equipo local, y es simplemente el efecto psicológico de no estar en tu ciudad. Para los jugadores, el estar lejos de su familia y el no dormir en su casa o en su hotel habitual de concentración puede afectar en el rendimiento.