Blindada, la Convención Bancaria vuelve a Acapulco
Acapulco, 19 de abril. Más de 10 mil elementos de la Guardia Nacional se hallan apostados en el puerto de Acapulco, Guerrero para ayudar a la reactivación económica y atacar directamente la extorsión por parte del crimen organizado, expuso la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado Pineda, en una reunión con empresarios, entre ellos Carlos Slim y Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
De acuerdo con la mandataria, hasta el 16 de abril había en Acapulco 8 mil 612 habitaciones disponibles, mientras antes de los embates del huracán Otis, en octubre pasado, el puerto contaba con 19 mil 600 cuartos. Aún no se recupera la mitad de la oferta hotelera previa al meteoro; sin embargo, Salgado Pineda sopesó: “después de todo esto que fue devastador, creo que nos hemos ido levantando a pasos agigantados”.
En conversación con medios, la titular del Ejecutivo estatal informó que 184 hoteles han reabierto, 62 por ciento de los 297 que había en Acapulco hasta el 24 de octubre de 2023. De los que han vuelto a operar, 22 se encuentran en la zona Diamante, 73 en la Dorada, 13 en Pie de la Cuesta y 76 de la región Tradicional. Además, 36 mil 545 negocios de diversos giros han reabierto en Acapulco y 2 mil 144 más en Coyuca de Benítez.
Permisos de 500 mil pesos
El presidente del CCE, Francisco Cervantes, aseguró que el Ayuntamiento de Acapulco cobra los permisos de remodelación hasta en 500 mil pesos, lo que se ha vuelto un obstáculo para acelerar la reconstrucción, sobre todo en condominios, que son otra parte de la oferta turística que tiene el puerto.
En la parte de la costera se ha avanzado muchísimo, por arriba de 85 por ciento. El problema está en la parte Diamante, afirmó el líder empresarial. Acusó que la presidencia municipal (a cargo de Abelina López Rodríguez) cobra hasta 500 mil pesos a cada departamento por autorizar remodelaciones.
“Vale la pena que la presidenta municipal tenga la sensibilidad de ayudarnos”, apuntó el empresario en entrevista colectiva. Consideró que un permiso de medio millón de pesos no se justifica en una situación como la que Acapulco vivió.