Otorgan a la obra de Vlady reconocimiento formal como patrimonio artístico nacional
El Inbal y la UACM trabajaron durante meses en la identificación de la obra. Foto cortesía Inbal
Por: Redacción La Jornada
La obra del pintor ruso mexicano Vladimir Kibálchich Rusakov, luego de permanecer más de una década en la incertidumbre jurídica, fue reconocida formalmente como patrimonio del pueblo de México, en un acto encabezado por el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) y la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM).
La titular del Inbal, Lucina Jiménez López, y la rectora de la UACM, Tania Rodríguez Mora, suscribieron dos convenios específicos que dan certeza legal a la obra del artista en resguardo de la institución universitaria, además de llevar a cabo un programa permanente y conjunto de difusión y conservación de este fundamental legado.
Con esos instrumentos jurídicos, que señalan los compromisos mutuos, ambas instancias cumplen cabalmente la voluntad del maestro Vlady y de su viuda, Isabel Díaz Fabela, quien decidió entregar piezas artísticas en comodato a la UACM para dar vida al Centro Vlady, que inició actividades el 19 de abril de 2007.
La UACM (con el Centro Vlady) y el Inbal (con el Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble) trabajaron durante meses en la identificación de la obra, la cual ya se encuentra registrada como patrimonio artístico nacional, al ser parte de la donación que el artista realizó en vida al pueblo de México por medio del instituto.
Esfuerzo compartido
Al signar los acuerdos con la UACM, Jiménez López señaló que éstos son fruto de un esfuerzo compartido y reconoció que el instituto es garante del patrimonio de Vlady como herencia para las presentes y las futuras generaciones. “Estamos a la vez firmando un convenio marco que nos permite no sólo dar certeza al acervo del Centro Vlady, sino colaborar también para su conservación y restauración.”
La directora general del Inbal advirtió que frente a circunstancias que buscan la privatización del patrimonio, estos acuerdos garantizan la protección del legado de Vlady. Y afirmó: “Es responsabilidad de la Secretaría de Cultura federal y del Inbal, como entidades del Estado mexicano, hacer todo aquello que es necesario para que su patrimonio sea efectivamente del pueblo de México y recuperar su sentido público”.
Rodríguez Mora recordó que la UACM ha cuidado, con todo el cariño que la palabra contiene, la obra de Vlady, pero también ha producido una enorme cantidad de conocimientos y saberes asociados a él.
Ambos convenios están asociados. Uno es de colaboración general, “en el que sumaremos y movilizaremos todos los recursos de la universidad, acercándonos a la institución cultural más importante de este país (Inbal), con proyectos que podemos impulsar juntos y que van a adquirir mayor fortaleza, acompañados de los saberes y de la larga tradición de trabajo cultural que tienen”, puntualizó la rectora.
El segundo convenio busca garantizar el deseo de alguien que éticamente estaba comprometido con la sociedad mexicana y las mejores causas del mundo, con un humanismo crítico y radical, que son Vlady y su padre, Víctor Serge.
El responsable del Centro Vlady, Fernando Gálvez, reseñó la salida del pintor Vlady de la Unión Soviética. A pesar de que vivió en constante huida por Europa, debido a la persecución política contra su familia desde que tenía 12 años, logró conservar este gran volumen de obras.