Madres buscadores encuentran cuatro fosas más en Jalisco

Guadalajara, Jal., 24 de febrero.- La brigada encabezada por Madres Buscadoras de Sonora a la que se sumaron colectivos de familiares de personas desaparecidas en Jalisco y otras entidades, terminó el sábado por la noche su labor en el estado, sobre todo en Tlajomulco donde en su último día sumaron el hallazgo de cuatro fosas clandestinas más en la colonia Chulavista, con un número todavía sin precisar de “positivos” durante los seis días de labores.

Tan sólo en una de las fosas con las que se dio el sábado, las buscadoras señalaron que al menos había cuatro cadáveres, pero no pudieron confirmarlo debido a que en cuanto encuentran indicios o restos humanos las autoridades de la Fiscalía del Estado toman las riendas de la exhumación, acordonan el área -la mayoría casas abandonadas- y las buscadoras se van a otro punto para seguir su labor.

“En nuestro último día de búsqueda en Tlajomulco tuvimos la localización de 3 casas y un terreno baldío con cuerpos. Hasta el momento desconocemos la cantidad exacta de osamentas encontradas pero sabemos que son más de 4”, informaron.

Durante los seis días, aunque no se puede hacer un recuento de los cadáveres hallados porque antes las autoridades tienen que realizar los respectivos peritajes y oficializar lo encontrado, fueron localizadas dos osamentas el primer día, un pozo con restos óseos el segundo día, dos pozos sospechosos y una fosa con siete bolsas con restos humanos, cinco casas con referencias de cuerpos enterrados dentro y fuera de las mismas y las cuatro fosas del sábado.

Además de Chulavista, en Tlajomulco, los hallazgos fueron en las colonias Lomas del Sur y Villas de San Sebastián. El pozo con restos óseos encontrados fue en el municipio de Villa Corona.

Antes de partir, la titular de las Madres Buscadoras de Sonora, Cecilia Patricia Flores, dijo que el éxito de su labor se refleja en las denuncias anónimas recibidas y que permitieron que prácticamente todos los días dieran con “positivos”, es decir indicios de cadáveres enterrados de forma clandestina.

Señaló que la confianza de las familias que tienen desaparecidos, quienes se acercaban a las buscadoras para ayudar, se reflejó particularmente en que quedaron al menos otras 100 denuncias que recibieron y que no pudieron ser atendidas, por lo que anunció que próximamente regresarán a Jalisco, donde invitó a todos los colectivos a seguir unidos como durante la semana para continuar por su cuenta las búsquedas, exigiendo el apoyo de las autoridades.

“Jalisco es un lugar olvidado por parte de las autoridades para la búsqueda de desaparecidos, igual que Sonora y otros estados. Tenemos que ser nosotras las madres las que salgamos a buscar a nuestros hijos con picos y palos, porque los amamos. No podemos descansar ni estar en la casa cruzadas de brazos esperando que las autoridades los busquen, porque nunca ha sido así”, dijo la activista.

Los colectivos jaliscienses de familiares de desaparecidos, que al menos durante los últimos dos años han realizado manifestaciones por su cuenta y no de forma unida, reconocieron que el trabajo conjunto desarrollado durante la semana es un aprendizaje que logrará resultados reales ante la crisis que se vive por las desapariciones en un estado que como Jalisco ocupa con casi 16 mil denuncias el primer lugar nacional en este delito.

A principios de semana durante su primer día las buscadoras fueron apoyadas escasamente por un par de patrullas y personal de la Comisión Local de Búsqueda, pues aunque pidieron el apoyo del gobernador Enrique Alfaro no se les otorgó con la cantidad de funcionarios públicos necesarios, luego que el gobernante dijo que no sabía quiénes eran, de dónde venían ni para qué.

La reacción airada de los colectivos de búsqueda hizo que al día siguiente Alfaro se arrepintiera y se reuniera con representantes de los colectivos y desde entonces ya hubo una participación amplia para brindar sobre todo seguridad con patrullas y personal policial, resguardando las labores que las madres de desaparecidos realizaron encontrando “tesoros” en lugares donde, incluso, la Fiscalía del Estado ya había descartado que hubiera cuerpos de personas inhumados de forma clandestina.

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Señaló que en los últimos meses los rangos de edad de desaparecidos son cada vez más jóvenes, pues se reportan adolescentes de 16 años y hasta jóvenes de 25 años.