Encuentran momia de tigre dientes de sable por primera vez en la historia
El tigre dientes de sable es una de las especies más emblemáticas del paleolítico, conocido también como la era del hielo. Es un animal que convivió con nosotros la mayor parte de nuestra historia. Si bien es extraño pensarlo así, los dientes de sable se extinguieron hace apenas 10 mil años y, si pensamos que los humanos modernos llevamos unos 200 mil años en el planeta, eso significa que compartieron la Tierra con nosotros durante 95% de nuestra historia.
Aún no sabemos la causa exacta de la extinción de este masivo felino cuyo árbol entero, el de los Machairodontinae, desapareció dejando como pariente más cercano al leopardo moderno. Algunas causas señalan la cacería masiva por parte de los humanos, otras causas señalan el deshielo que ocasionó pérdida de hábitat y presas y otras más creen que fue una combinación de ambos factores, como le ocurrió a casi toda la megafauna de América y Eurasia con la expansión del Homo Sapiens.
Entre las múltiples especies que son consideradas dientes de sable, aquellas de la familia Machairodontinae, las dos más conocidas son la del Smilodon, el más famoso por sus largos colmillos y originario del continente americano, y el Homotherium, su primo cercano y rey de las estepas del norte de Eurasia.
A pesar de todo este conocimiento que poseemos sobre esta familia de gatos, nunca habíamos tenido la certeza de cómo se vería un dientes de sable, pues el arte pictórico que les representa es muy escaso y los restos fósiles son muchísimo menos comunes que los de otros animales del pleistoceno como el mamut lanudo o el perezoso gigante.
Esto cambió hace poco: por primera vez en la historia los paleontólogos encontraron una momia perfectamente conservada de uno de estos animales en el permafrost de Siberia. En las estepas del norte de Rusia, en la República de Sajá, un Homotherium joven fue descubierto en perfecto estado, con el pelaje intacto y facciones perfectamente marcadas.
El dientes de sable momificado tiene unos 32 mil años de edad y fue descubierto en una expedición del 2020. No fue hasta el 14 de noviembre de este año que el anuncio se hizo público en la revista Scientific Reports, junto con las fotografías del ejemplar.
Con sólo el registro fósil, el debate siempre consistió en saber si los dientes de sable tenían los colmillos de fuera, como suelen ser mostrados en las paleoilustraciones y más que nada, en la cultura popular, o si estaban escondidos bajo los labios. El color de su pelaje fue otro debate constante. Los felinos modernos suelen tener colores vibrantes que se mezclan con su entorno para ayudarlos a cazar.
Ahora sabemos que, al menos en el caso del Homotherium, la hipótesis del labio que permitía a sus colmillos actuar como arma escondida resultó ser la correcta, al menos, en el caso de los infantes. El pelaje sorprendió a los científicos, particularmente por su tono oscuro y su falta de patrones. No obstante, creen que es posible que, como los gatos modernos, el Homotherium tuviera un pelaje más oscuro en la infancia que se aclaraba con los años. En el caso del Smilodon, aún no tenemos una respuesta.
Este descubrimiento nos deja un paso más cerca de entender el mundo en el que los humanos nacimos, crecimos y vivimos prácticamente toda nuestra historia. Un mundo cubierto de animales gigantes y depredadores que nos tenían a nosotros como presa. Un mundo cubierto de hielo, estepas y tierras habitables que hoy están bajo el agua. Un mundo que desapareció hace apenas 10 mil años y nos sigue dejando sorpresas que se perdieron con el tiempo.
